¿Tienen tus hijos una adicción a las pantallas?

ACTUALIZADOS: 21 marzo 2023

Las nuevas tecnologías nos facilitan la vida, tanto a adultos como a niños y a personas adolescentes. Para los más peques, un ordenador o un móvil pueden servir de gran ayuda para su conocimiento, aprendizaje, desarrollo de estímulos y también una fuente de entretenimiento con diversas alternativas de juegos. 

Pero las tecnologías deben usarse de forma moderada, con control y con responsabilidad. Más aún cuando hablamos de las personas menores de edad, y en tiempos de covid 19. En las siguientes líneas podrás identificar si la relación de tus hijos con sus dispositivos es adecuada, si tus hijos podrían tener una adicción a las pantallas y te damos consejos muy útiles para ponerle remedio a esa conducta.  La adicción a las nuevas tecnologías es un problema a tratar.

¿Cuántas horas pueden pasar los niños usando un teléfono o tablet?

Las horas que puedan pasar los menores delante de las pantallas, por ejemplo de un teléfono móvil, depende mucho de la edad. Por ejemplo, el doctor Dimitri Christakis, director del Centro de Salud, Comportamiento y Desarrollo Infantil del Instituto de Investigación Infantil de Seattle, explicó en una entrevista a Medical Daily, que antes de los dos años es desaconsejable que los menores de dos años miren la televisión o alguna de las tecnologías con pantalla interactiva. “El cerebro del recién nacido no procesa el contenido. Es solo un bombardeo de imágenes y sonidos». El doctor félix notario también recomienda esta conducta, evitando el contacto del chico con las tecnologías modernas.

Sin embargo, a partir de los dos años de edad será mucho más difícil evitar que los pequeños pasen unas horas viendo estas imágenes, con acceso a un contenido que comienza a resultarles estimulante. A esa edad comienzan a tener más poder de decisión y a decir qué es lo que quieren hacer. Así, la Academia Americana de Pediatría recomienda que las personas entre 2 y 5 años usen las productos tecnológicos, como mucho, una hora al día. Y entre los 6 y los 18 años dicen que debería ser de máximo 2 horas diarias. La misma Academia explica que comprenden que los adultos puedan ser flexibles alguna vez y permitir que sea algo más de tiempo, cuando hablamos de hijos adolescentes. Por ejemplo, tres horas diarias. 

¿Qué consecuencias tiene para un niño o niña pasar muchas horas frente a una pantalla?

Los expertos en psicología infantil han estudiado muy a fondo cuáles son los problemas que una sobreexposición a las pantallas puede conllevar para los jóvenes. Las personas podemos hacernos adictas a la dopamina (hormona de la felicidad que llega al cerebro) que nos proporcionan las recompensas que recibimos a través de las redes sociales (notificaciones, mensajes…) y los videojuegos con sus recompensas. Algunas de los más peligrosos efectos son:

  • Insomnio

Según un informe de la Universidad de Washington School of Medicine, publicado por Medline, muchas horas frente a un PC, televisión o móvil puede llevar a la pérdida del sueño de un niño para dormir en la noche. 

De acuerdo con la información que aporta Healthy Children, las luces de tabletas, lectores electrónicos o teléfonos  tienen una longitud de onda corta que afecta los niveles de melatonina, un problema que lleva al cerebro a sentir que es de día. Además también estimulan al cerebro , impidiendo a tus hijos relajarse cuando tienen que dormir, pudiendo generar un tic. 

  • Problemas de atención en sus tareas

El uso de teléfonos móviles o una tablet durante muchas horas por parte de niños y adolescentes, hace que tengan el doble de probabilidades que aquellos que hacen un uso moderado, de mostrar síntomas de trastorno o síndrome por déficit de atención  o de hiperactividad (TDAH), según un estudio realizado por la American Medical Association

El estudio analizó a cerca de 3.000 adolescentes durante dos años. «Las nuevas tecnologías móviles pueden proporcionar una estimulación rápida y de alta intensidad todo el día” y esa sensación va enganchando a los chicos, que querrán seguir manteniendo ese nivel alto de hiperactividad y conductas en la vida. 

  • Problemas de ansiedad y depresión

Por un lado, las horas que los chicos (y, en realidad, también los adultos), pasan delante de una pantalla, es tiempo que pierden de socializar mediante la comunicación, de jugar o de estar con su familia, tres actividades muy positivas para el desarrollo de la persona y también para generar felicidad. 

Además, las redes sociales son un medio que causa mucha ansiedad y adicciones. Los datos de un estudio del Instituto ChildMind explica que aquellos usuarios de redes sociales que pasan muchas horas expuestos a las nuevas tecnologías aumentan el riesgo de sufrir depresión en un 27%. Y es que en las redes, la gente muestran una cara muy feliz de sus vidas y eso puede llevar a frustraciones para un adolescente que siente que sus relaciones en la vida cotiadiana no son tan buenas. 

  • Insomnio

Muchos pequeños, con adicciones a los estímulos producto de su dependencia con las nuevas tecnologías , pasan en ocasiones las horas de sueño con sus teléfonos o tabletas, aprovechando que los mayores o tutores no los ven. Además, los estímulos que han activado el cerebro a lo largo del día, hacen que sea más difícil conseguir dormir con la pérdida del sueño. Estas son señales de una posible adicción.

En la adolescencia, dormir menos de siete horas al día aumenta el riesgo de querer pensar en suicidarse, de acuerdo con los datos que proveen los investigadores del Institute for Social Research, de la Universidad de Michigan.

  • Aumenta el riesgo de padecer obesidad

Recuerdan los expertos que el tiempo que una persona pasa frente a una pantalla en sus momentos de ocio, es tiempo que no está en activo en su vida. Los pequeños ya pasan muchas horas sentados en el colegio y mientras hacen sus deberes y tareas escolares. Explican desde Mediline Plus que “las actividades que implican «tiempo frente a una pantalla requieren muy poca energía y a menudo sustituyen a la actividad física”. 

Además, cuando ven la televisión o con el uso de ordenadores o móviles, aparece publicidad, en muchas ocasiones de alimentos poco saludables, que los anunciantes asocian a los contenidos infantiles. Y esos signos llevarán al ‘peque’ a querer consumir esta comida. 

¿Cuándo debes poner un remedio a la adicción de tus hijos por las pantallas?

Si ves que tu hijo o hija no puede pasar un buen rato sin tener que mirar su móvil, deberías ponerle un remedio a la posible adicción o tic. Las adicciones no se reducen con los años, sino que pueden ir a más. Por eso, son necesarios los cambios, ya que con el tiempo, esos jóvenes pueden acabar siendo adultos con adicciones a sus teléfonos y con problemas para socializar en la vida real. 

Pero hay soluciones que son útiles y necesarias. La información de un estudio realizado por el hospital  San Joan de Deu aporta que “la parte buena es que no hay daños permanentes en los cerebros de los niños expuestos. Basta alejar al paciente de las pantallas para que recuperen las capacidades mentales”. El doctor félix notario comparte esta definición, señalando que el tratado de un paciente por adicción a las nuevas tecnologías es más sencillo de lo que se cree.

Formas de ayudar a que tus hijos usen el móvil de una forma correcta

Hay diferentes decisiones que, como padre o madre, puedes tomar para que tus hijos tengan una relación sana y no de abuso con las tecnologías. Los expertos recomiendan lo siguiente:

  • Cuida tu propio uso del móvil. La imitación es uno de los signos principales en la juventud. Y si te ven con una conducta de muchas horas con tu móvil o tu tableta, ellos creerán que eso está bien y también querrán hacerlo. De acuerdo con un informe del Instituto Psicológico Desconecta la nomofobia (el miedo irracional a salir de casa sin el móvil) es un problema que ya afecta al 77% de españoles adultos, incluso convirtiendose en un tic.
  • Busca actividades de ocio fuera de las pantallas. Los niños y los adolescentes tienen una dependencia de estímulos constantes y estar en constante movimiento. Busca hacer cosas que gusten y diviertan a tu hijo, de manera que pase menos horas frente a un móvil, televisión u ordenador y reduzcan el riesgo de adicción. La pandemia de covid 19 dificulta esta tarea, pero debes esforzarte al máximo.
  • Pon unas normas. Como para todo, los más pequeños están en constante aprendizaje y necesitan ciertas reglas que les ayuden a crecer sanos físicamente y mentalmente. Siéntate con tu hijo o hija y llega a un acuerdo, a través de la comunicación, sobre los momentos y situaciones del día en los que tiene permitido el uso de las nuevas tecnologías. Recuerda que no será fácil que se cumpla cuando sea adolescente, momento en que tiene mucha libertad y pasa muchas horas fuera de casa. 
  • Educa a tu hijo a usar el móvil. No solo tienes que estar seguro de que tus hijos usarán el móvil durante el tiempo recomendado para evitar ser adictos a las pantallas. Sino que es bueno que pases tiempo y dediques esfuerzo a que comprenda los peligros de un sitio web en Internet y las redes sociales. No solo hay que evitar adicciones, sino también que tu hijo pueda ser víctima de algún pedófilo, de bullying por parte de otros adolescentes o que pueda ser él o ella quien ataque a sus compañeros y los acose. 
  • Contrata una tarifa limitada de datos. Son los padres y madres quienes contratan y pagan las tarifas, así que son quienes pueden decidir poner ciertos límites para que los datos que se pueden consumir al mes sean limitados. Lo mismo con el WiFi. Si ves que tu hijo pasa demasiadas horas con su smartphone u ordenador, pacta unas horas en las que se desenchufará el router para evitar la adicción. 
  • Usa aplicaciones de control parental. Existen aplicaciones avanzadas, muy sencillas de usar y recomendadas por expertos en la salud y el bienestar de pequeños y adolescentes, que permiten a los adultos y tutores tener los recursos para una revisión constante de la dependencia que sus hijos tienen con sus dispositivos. Sirve, no solo para evitar que pase demasiadas horas frente a una pantalla, sino también para bloquear contenidos nocivos como el porno, controlar que no sea víctima de ciberbullying u otros peligros de la red e incluso para cuidar dónde está y no sufra peligros, ya sean físicos o en su salud mental. 

¿Cómo una aplicación espía de control parental puede una adicción a las pantallas?

Hay aplicaciones móviles creadas con el objetivo de que los mayores pueden cuidar de sus hijos. La más popular es mSpy, que te explicaremos a continuación cómo debe utilizarse, aunque también hay otras como YouPy o Spyzie. La ventaja de mSpy es tiene muchas funciones, es muy segura y su coste es muy asequible. 

Estas aplicaciones que permiten vigilar un dispositivo de forma remota y observar posibles signos de abuso en la actividad de tus hijos en su teléfono, en su ordenador o en la tableta que usen. 

Cabe añadir que muchas son las personas que utilizan estas aplicaciones también para entornos laborales y estar así seguros que los trabajadores hacen un uso correcto de los dispositivos de empresa (por ejemplo, no compartiendo información confidencial que no debería salir de la compañía o evitando entrar en páginas desconocidas o descargando aplicaciones fraudulentas que puedan introducir virus a los dispositivos empresariales) y también para asegurarse de que los trabajadores utilizan sus horas destinadas al trabajo de una forma eficiente. 

Incluso están aquellos que usan estas herramientas para descubrir si su pareja pudiera estar siendo infiel. Así, pueden salir de dudas, ya que los dispositivos móviles son ahora las principales herramientas de comunicación en casos de infidelidad mediante la mensajería instantánea. 

Hay que decir que el uso des aplicaciones espía es totalmente legal siempre y cuando la persona que está siendo espiada lo sepa. Por tanto, puedes anunciarlo a tus hijos (o a tus trabajadores). En muchos países del mundo, también está avalado el uso de estas aplicaciones para proteger a los menores de edad contra todo peligro o adicción. 

Por ejemplo, si eres padre, madre o tutor legal de alguien, aunque la normativa española recoge el derecho a la privacidad y a la intimidad de los menores de edad, al mismo tiempo, hay antecedentes en los que la justicia ha avalado el derecho de los progenitores de mantener una revisión sobre el uso del smartphone o del ordenador por parte de sus hijos. 

¿Cómo usaraplicacion espía mSpy para evitar una adicción a las pantallas? 

Esta herramienta ha conseguido mucha popularidad porque es muy útil y presenta una gran variedad de funciones que ayudan a cuidar de los hijos e hijas. Es compatible con tecnologías como smartphones y ordenadores. Según el plan de pago que escojas, puede servirte para controlar un solo dispositivo o para vigilar varios.

mSpy permite controlar el uso que tus hijos hacen el móvil de forma remota. Es decir, que desde tu propio teléfono, podrás obtener la información de si tus hijos están usando su móvil o su ordenador y que está haciendo en Internet. 

Así, imagínate que has acordado unos horarios con tus hijos y ves que están usando su teléfono en las horas que está en el colegio, mientras está haciendo sus tareas escolares o por la noche, cuando debería dormir. Tú puedes controlar estas situaciones y descubrir algun tic.  Para evitar que tu hijo tenga una adicción o un síndrome de abstinencia con las pantallas, esta app te permite bloquear sitios web indeseados o inadecuados para los menoresy establecer horarios específicos cuando el acceso a determinados sitios está restringido. 

Además de conocer cuándo tu hijo está conectado para saber si entra dentro del horario permitido, mSpy te permite espiar a distancia los SMS enviados, recibidos,  las llamadas, el correo electrónico,  la actividad e información dentro de aplicaciones como Whatsapp, Facebook, Snapchat, Instagram, Skype, Telegram, Viber, Youtube. También se puede acceder al historial de navegación del navegador desde el menú principal. 

El objetivo que persigue mSpy no es solo evitar las adicciones de un adolescente y sus terribles consecuencias. Sino también que los jóvenes no vean contenidos dañinos como porno y que no se comuniquen con personas que usan Internet para abusar o hacer daño. 

Instalar este tipo de productos en el teléfono de tus hijos es muy sencillo. Si mientras estás instalando la aplicación tienes algún problema o duda, puedes contactar directamente con el servicio que ofrecen mSpy de forma gratis para ayudarte con las dudas. Este equipo de apoyo habla varios idiomas. Se instala en muy pocos minutos y es muy discreto ya que el icono de la app no se muestra en el dispositivo una vez terminado el proceso. 

Y tú, ¿qué control ejerces para cuidar de tus hijos cuando usan Internet? ¿Crees que puedan ser adictos a las pantallas, tener un síndrome de abstinencia ante la pérdida del contacto con la tecnología, o ser víctimas de ciberacoso? Si no le has puesto remedio ya, debes buscar una solución, para evitar males mayores. La adicción a las nuevas tecnologías es un problema muy grave, que puede afectar la vida de un niño o adolescente en cualquier momento.

Sobre el autor

David G. Espinoza Aviles

Psicólogo con orientación clínica

Psicólogo con orientación clínica, egresado con honores del Instituto Tecnológico de Sonora (ITSON). Cuenta con estudios personales en el uso de la Hipnosis Clínica como herramienta terapéutica para su implementación en la práctica profesional.

Ha publicado múltiples artículos de interés en diversos sitios web especializados y revistas digitales con temáticas propias de la Psicología Clínica, Psicopatología y estudios de caso, entre otros.

Es miembro de diversas sociedades para personas con alto CI tales como Mensa, Triple Nine Society, entre otras, caracterizadas por sus altos estándares de selección.

Como profesionista, desenvuelve su ejercicio profesional en el ámbito de la consulta privada.